Confirmando el Camino.

Interesante presentación de afamado médico me ha enviado una grandísima amiga, que comienza (cito aproximadamente de memoria) señalando que hasta ahora eran iluminados, meditadores y sabios los que afirmaban que casi la totalidad de nuestro mundo la construyen nuestros pensamientos, y que hoy día también lo afirma la ciencia.
No es de desdeñar esta seguridad de la ciencia que se percata de lo que siglos vienen diciendo los sabios.
Muchas personas leen a éstos con duda.
O relegan sus afirmaciones a estados muy avanzados del espíritu donde no se sienten situados ellos .
Y, en consecuencia y tristemente, ni siquiera intentan seguir sus enseñanzas.
Y se privan de construir su vida y su propio mundo como podrían hacerlo, y hallar felicidad donde antes encontraban conflictos y muchas amarguras.
Si la ciencia les sirve para ello para darles seguridad de tal logro, bienvenida sea.
Sea bienvenida cualquier forma y manera que les permita entrar en el Camino de la Felicidad.
Modestamente en este blog se intentan mostrar diversas formas por las que puede entrar en él el ser humano.
Se muestran habituales errores de la mente que lo impiden.
Y se muestra forma cierta y personal que, al avanzar en ella, la persona misma y por sí misma descubre la seguridad de su Camino.
No vendemos tales cosas. Las compartimos.
Son en exceso valiosas para ponerles precio.
Curiosamente, por mirar tal afirmación del modo que impide comprenderla, much@s lo desdeñan.
“Si fuera tan valioso, se sacaría mucho dinero de ello”, dicen.
Y no perciben que los grandes bienes son de la Humanidad y gratis hay que devolvérselos a ella.
Como tampoco la misma ciencia cobra por mostrar sus descubrimientos…
Amig@s que me leéis, confirmad vuestro Camino.
Es verdadero.
Es sólido.
Es personal y goza de autogarantía.
Es la correcta forma de vivir…
Y queda en pié la duda de por qué personas –no sé si pocas o muchas- no entran en el Camino aun teniendo noticia de él.
Respuestas generales las hay sin duda:
– El condicionamiento del cerebro desde la infancia es muy poderoso.
– Salirse de la tradición hasta milenaria cuesta mucho, requiere mucho valor y capacidad de asumir la soledad.
– Abandonar las creencias previas es un acto esforzado y difícil.
– El tiempo de centrarse disciplinadamente en la tarea de “descubrir el VER, el darse cuenta en profundidad” puede ser mayor que el interés en obtener el resultado.
– La acción del ego (en forma de orgullo y de soberbia) rechaza que otras personas le muestren “a él, oh él” el camino del vivir que no ha encontrado por sí mismo.
– Los prejuicios ambientales y los conocimientos en los que cada quien fía, si en algo se oponen a lo que se les presenta, actúan como una barrera poderosa…
Suficientes causas parecen éstas para que muchas personas no se decidan a entrar y hasta, habiendo entrado en el Camino insuficientemente, lo abandonen.
PERO ES CAMINO DE LIBERTAD, A NADIE SE LE PUEDE OBLIGAR A TOMARLO.
Y quedará siempre la pena y la tristeza de la hermandad humana, para quienes intentan propagarlo, de que no se extienda pronto y seguro de modo universal.
Sin embargo, no es preciso.
Unos pocos que lleguen de verdad, podrán con su ser nuevo cambiarnos a muchos, a todos incluso.
¡Conocemos tan poco la causas invisibles!
¡Somos tan primitivos que pensamos que cambiar el mundo es cosa de grandes poderes, grandes medios, grandes movimientos, grandes masas de gente!
Miramos LO REAL en formato de bolsillo.
En las cosas visibles que son grandes para sentidos y pensamientos, dejando a un lado
lo que es EL SER y EL ORDEN INVISIBLE.
La consciencia que no se ve, RECORRE TODO EL UNIVERSO.
Con la mirada de la vieja ciencia, pensamos que ella corresponde solamente a “seres vivos” y no todos…Lo que dicen los biólogos…Lo que otros dicen…
Y existen, sin embargo, sabios que saben por sí mismos que la Tierra también es un ser consciente, que el Sol es un gran Logos, que las estrellas son Inmensas Entidades ¡cuyo cuerpo es la estrella que los astrónomos reconocen!.
La lección que al principio citaba del afamado médico, no solamente se extiende a cómo son nuestros pensamientos, que son ellos lo más externo de nuestro interior.
Va mucho más lejos, tanto que la ciencia aún no puede reconocerlo.
Existe un mundo del todo diferente al que conocen -¡y malamente!- nuestros sentidos.
Un mundo en el que LA CONSCIENCIA se extiende de forma universal.
Y que –por lo tanto- nos abre a los humanos un Camino ilimitado…
Amig@s mí@s, os invito de corazón a caminar por él.
A confiar en que lo haréis vuestro, aunque tengáis incluso pobre imagen de vosotr@s mism@s, PORQUE ESTÁ ABIERTO PARA TODOS…